La metamorfosis, de Franz Kafka, resumen y comentarios

La angustia existencial y el surrealismo en su expresión máxima

La metamorfosis por Franz Kafka
Editorial Austral

es probablemente una de las obras más conocidas de Franz Kafka, junto con El Proceso y El castillo. Publicada en vida del autor -a diferencia de estas últimas que lo fueron de manera póstuma-  refleja maravillosamente el tono surrealista y la vez intensamente psicológico de los relatos de este genio literario del siglo XX. Por ello conviene tener presente sus aspectos más resaltantes, que mencionamos en esta breve sinopsis.

El argumento de La metamorfosis, de Franz Kafka

El tema central de la historia se encuentra resumido en forma brillante en la primera oración de la obra, que puede considerarse como una de las 10 frases de inicio de una novela más impactantes:

“Al despertar Gregorio Samsa una mañana, tras un sueño intranquilo, se encontró sobre su cama convertido en un monstruoso insecto”.

Aunque no lo aclara, por algunos detalles se deduce que el insecto a que se refiere es una cucaracha gigante.

Esta más que inusual circunstancia desestabiliza, por supuesto, la vida de Gregorio y su familia, integrada por sus padres y su hermana adolescente Grete. Estos deciden ocultar al mundo la situación de Gregorio, temerosos de la reacción que las demás personas pudiesen adoptar.

A lo largo del relato, Kafka explica la angustia de Gregorio por su nuevo cuerpo y sus dificultades vitales, de movilidad, para comer, etcétera. Sin embargo, donde mayor énfasis hace es en el efecto sobre la familia de este.

En efecto,  por un lado, Gregorio trabajaba de viajante de comercio y era el único sustento de sus padres y su hermana, luego de que el negocio familiar quebrase.  Al perder el trabajo, la situación económica de la casa se complica, y el padre debe conseguir un empleo de ordenanza.

Por otro lado, aunque sus padres y hermana lo aceptan al principio y entienden que tienen que tratar de cuidar de Gregorio, las dificultades para alimentarlo y mantenerlo escondido conspiran en su contra. Lo confinan a una habitación de la casa y, en las dos oportunidades que sale de ésta, llega el caos. En una de ellas, el padre le lanza unas manzanas, una de las cuales se le incrusta en el cuerpo y empieza a hacer que este vaya deteriorándose. En otra, causa pánico entre tres hombres que acababan de alquilar uno de los cuartos, que anuncian que se marcharán sin pagar.

Tanto los padres como Grete empiezan a pensar en la manera de librarse de Gregorio; lo culpan, incluso, de que ya no pueda trabajar y mantenerlos, sin tomar en cuenta la tragedia personal que significa para él su insoportable realidad. Sin embargo, el problema se soluciona solo, pues Gregorio muere, por una mezcla de sus heridas, hambre y pena; literalmente su cuerpo invertebrado estalla cuando es pinchado con una escoba por la criada.

Al final del relato, los padres de Gregorio y Grete se marchan de paseo al campo, mientras reflexionan sobre las buenas perspectivas hacia el futuro y hacen planes para mudarse a una casa más pequeña pero mejor ubicada. Todo como si la tragedia de Gregorio nunca hubiese ocurrido.

El trasfondo de La metamorfosis, de Franz Kafka

Evidentemente este excelente relato es alegórico, metáfora de una realidad que el autor quiere resaltar a través de una situación que pareciera absurda. Pero, ¿a qué se había querido referir Kafka con esta historia tan surrealista como impactante?

Creemos, en primer lugar, que atiende a los sentimientos de inferioridad que el ser humano puede padecer. El rechazo de la sociedad a personas con defectos físicos o mentales, o que no alcancen los parámetros "mínimos" de éxito profesional o social, puede generar que el rechazado se llegue a sufrir emocionalmente casi como Gregorio Samsa llegó a sentirse físicamente: como un insecto repulsivo. En este sentido, muchos criticos piensan que refleja el propio temperamento del escritor, hombre retraído y "desubicado" en la sociedad.

Pero también refleja una dura y cruda crítica a cómo tratamos y queremos a algunas personas mientras nos representan una ventaja, mientras nos ofrecen algo, y cómo en el fondo somos totalmente egoístas y damos preeminencia absoluta a nuestros deseos y necesidades frente a las de los demás. En efecto, la familia de Gregorio estaba más preocupada con los efectos de su metamorfosis en sus propias vidas que por el drama personal de éste, y se sintió incluso aliviada con su muerte. Así sucede, por ejemplo, en algunas familias con los ancianos o con personas muy enfermas que requieren de muchos cuidados.

El estilo y la técnica de La metamorfosis, de Franz Kafka

La originalidad y expresionismo de la temática de esta novela corta contrasta con la sencillez de su estilo. Kafka utiliza la figura del narrador onmisciente tradicional, sin reflexiones en primera persona, con una hilación cronológica, sin anacronías (es decir, sin saltos hacia el pasado o el futuro), y sin utilizar una profusión de recursos literarios.

En otras palabras, relata un suceso que de por sí sería extraordinario, como si se tratase de algo natural, sin mayor importancia que la que podría tener cualquier otro "contratiempo" cotidiano. Recuerda, en este estilo, a El extranjero, de Albert Camus, por ejemplo.

Resalta también la sencillez en cuanto al espacio geográfico donde transcurre la novela, reducido al dormitorio de Gregorio y al salón y comedor de la casa familiar.

Es importante destacar, por último, el título original en alemán de la novela, Die Verwandlung, que literalmente se traduce como La transformación. La traducción escogida para las versiones en español e inglés, por ejemplo. Existen dudas y discusiones en cuanto a por qué Kafka no escogió la palabra alemana para este término (Metamorphose).